Mi Noveno Grado

 En mi noveno grado yo tuve muchas anécdotas, entre ellas muchas muy alegres, pero claro, algunas tristes. Una de las más alegres fueron las fiestas que hacíamos para los cumpleaños de mis compañeros. Esto debido a que eran fiestas mega improvisadas. Me refiero a que en ellas a veces las cosas se quedaban cortas (refrescos, Doritos, etc.), sin embargo, eran fiestas en las cuales todo el mundo reía, bailaba, comía, etc. La gira escolar al Bosque Forestal La Marquesa, un punto bastante reciente que quiero compartir con ustedes. Mi maestra de historia y yo por no subirnos al teleférico caminamos por la vereda del parque. Una de las anécdotas más alegres que he tenido. Ese día mi maestra y yo caminamos por casi 20 minutos cuesta arriba para llegar al Mariposario, lamentablemente llegamos muy cansados y no logramos disfrutar de todas las facilidades. 
Mis caídas en la escuela, qué recuerdos. El día que yo me iba a ir de viaje a la Florida ocurrió mi primera caída. Fue mientras escapaba de mi amigo porque me estaba molestando. Claro, les daré un pequeño resumen. Ese día era uno lluvioso y mis tenis eran muy resbaladizos. Ya entienden por qué me caí, ¿verdad? Mi ultima caída fue en la clase de Educación Física. El primer día que tomamos la unidad de baloncesto, un breve resumen, yo estaba en la cancha molestando a mis compañeros y de repente me llega el karma. ¡PUM! me caigo en la cancha de baloncesto de mi escuela. Pero claro mis momentos tristes también existen. Prefiero que ustedes lean los momentos felices y yo prefiero no recordarlos. Espero que cuando lleguen al noveno grado, puedan vivir momentos alegres también y les recuerdo que la felicidad es uno de los sentimientos más importantes que hay en tu vida. ¡Vive la vida ya que es una sola!

-Gustavo López Figueroa